24 November 2024
 

 

 

 

 

27 Marzo 2013.  La naturaleza de la curia romana queda clara en el artículo 1º de la Constitución Apostólica Pastor Bonus: La curia romana es el conjunto de dicasterios y organismos, que ayudan al romano pontífice en el ejercicio de su suprema misión pastoral, para el bien y servicio de la Iglesia universal y de las Iglesias particulares, con lo que se refuerzan la unidad de la fe y la comunión del Pueblo de Dios y se promueve la misión propia de la Iglesia en el mundo. Fuente: Zenit, Autor: Rocío Lancho.

 

Las funciones de la curia romana están definidas en el actual Código de Derecho Canónico del año 1983 con algunas precisiones posteriores con la Constitución Apostólica Pastor Bonus de Juan Pablo II en 1988. La curia romana no es la única que presta un servicio al romano pontífice en el gobierno de la Iglesia, también el colegio cardenalicio realiza algunas funciones de gobierno junto con el papa. Además, en la Pastor Bonus está previsto que el papa convoque de vez en cuando a los jefes de dicasterios, como también se conoce a los departamentos u organismos especializados de la curia romana.

La curia está formada por Secretaría de Estado, Congregaciones, Tribunales, Consejos Pontificios y Oficinas. Cada una de estas ramas está subdividida y tiene funciones diferentes dentro del gobierno de la Iglesia. Las Congregaciones son nueve: Doctrina de la Fe, Iglesias Orientales, Culto Divino y disciplina de los sacramentos, Causa de los santos, Obispos, Evangelización de los pueblos, Clero, Institutos de vida consagrada y Sociedades de vida apostólica y Educación católica. La función es de poder ejecutivo. Los tribunales tienen funciones judiciales y son tres: Penitenciaria Apostólica, Signatura Apostólica y Rota Romana. Más numerosos sin embargo son los Consejos Pontificios, exactamente doce: Laicos, Unión de los cristianos, Familia, Justicia y Paz, Cor Unum, Pastoral para los trabajadores sanitarios, Textos Legislativos, Diálogo interreligioso, Comunicaciones sociales y Nueva evangelización (creado en 2010). Estos Consejos Pontificios tienen una función de promoción de actividades y iniciativas de su competencia. Y finalmente las Oficinas que son tres, Cámara Apostólica, Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica y Prefectura de los Asuntos económicos de la Santa Sede. Estas oficinas tienen una naturaleza económica.

Al frente de cada dicasterio se nombra un Prefecto en el caso de las Congregaciones o un Presidente para los demás dicasterios. Se nombra también a un secretario y un subsecretario. El papa se encarga de designar varios miembros de cada Congregación. Tradicionalmente los miembros debían ser cardenales pero actualmente a cada dicasterio pertenecen también obispos.

Además de los miembros, se nombran oficiales y consultores. Mientras que la función de los oficiales es encargarse de los asuntos ordinarios del dicasterio, los consultores llevan a cabo una labor de asesoramiento.

Hay dos momentos en las que los miembros del dicasterio se reúnen, puede ser en asambleas plenarias o en sesiones ordinarias. A las plenarias, que se celebran al menos una vez al año,  se convocan a todos los miembros, sin embargo en las sesiones ordinarias se convocan a los miembros presentes en Roma. El presidente o prefecto del dicasterio el que decide la convocatoria y el orden del día.

CÓMO FUNCIONA LA CIUDAD DEL VATICANO

            El Estado de la Ciudad del Vaticano se encuentra en Roma, tiene una superficie de un poco menos de un kilómetro cuadrado y cuenta con unos 600 habitantes. Es el Estado más pequeño del mundo. El Estado del Vaticano está rodeado en la mayor parte de su perímetro por la muralla. Los límites del Vaticano se definieron de acuerdo con el Estado italiano mediante los Pactos Lateranenses, el 11 de febrero de 1929.

El Estado de la Ciudad del Vaticano es universalmente reconocido como entidad soberana de derecho público internacional, distinto de la Santa Sede, que es el órgano soberano de la Iglesia católica. En el Vaticano el papa y la Sede Apostólica desarrollan su misión de gobierno de la Iglesia universal con la independencia necesaria a su ejercicio.

La forma de gobierno es una monarquía electiva. El jefe del Estado es el Sumo Pontífice, el cual reúne en sí la plenitud de los poderes legislativos, ejecutivo y judicial.

Las disposiciones legislativas emanan tanto del papa, como por su delegación de la Comisión Pontifica por el Estado de la Ciudad del Vaticano, presidida por un cardenal. El poder judicial tiene como órganos propios --que ejercitan sus funciones en nombre del pontífice--, un juez único, un tribunal de primera instancia, una corte de Apelaciones y una corte de Casación. El poder ejecutivo está confiado a la Comisión Pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano, de la cual dependen las direcciones generales con sus respectivas oficias y servicios, y las direcciones del governatorato.

Hay también un vicariato encargado de la administración religiosa propia de la Ciudad del Vaticano. Naturalmente es diferente del vicariato de la ciudad de Roma que se ocupa de las cuestiones eclesiásticas relacionadas con la capital italiana. Este vicariato se encarga de la pastoral en el Vaticano y tiene también la jurisdicción sobre el Palacio Pontificio Laterano y sobre el Palacio y las Villas Pontificias de Castelgandolfo.

La seguridad del Estado se confía al Cuerpo de Vigilancia, formado por casi un centenar de miembros de la gendarmeria. Vigilan las diferentes partes del Vaticano, realizando funciones de orden público durante las audiencias, de control de la basílica y de todo el territorio vaticano, junto con la Guarda suiza pontificia.

La Guarda suiza pontificia, que lleva el uniforme tradicional de color azul, amarillo y rojo de los Medici, se fundó en 1506. Está formada por soldados suizos que dependen directamente de la Santa Sede para la custodia particular de la persona del romano pontífice y del Palacio Apostólico y vigilan los accesos externos del Vaticano. Residen en la Ciudad del Vaticano y su idioma oficial es el alemán.

La bandera de la Ciudad del Vaticano está dividida verticalmente en dos campos iguales, uno amarillo cercano al hasta y el otro blanco, al centro de la cual está la tiara con las llaves.

El Estado de la Ciudad del Vaticano emite monedas y sellos propios. La emisión de los valores postales no están sujetas a limitaciones especiales excepto las de las convecciones internacionales a las que está adherido el Estado vaticano, y las que derivan de los acuerdos con el Estado italiano.

Los vehículos registrados en el Vaticano tienen dos tipos de matrícula SCV y SV. La primera se usa en los vehículos del Estado Vaticano destinados principalmente a tareas internas. Los automóviles oficiales usados por el santo padre llevan la matrícula SCV. Los vehículos autorizados para uso privado tienen la matrícula CV (ciudadanos vaticanos, jefes de dicasterio, etc.) También la sigla internacional que identifica el Vaticano es la V. Hay también algunos automóviles con la matrícula diplomática CD; los cardenales que viven en Roma están autorizados para usarlas en su coche.