6 Enero 2013 Mons. Demetrio Fernández
¿En qué consiste la ideología de género, de la que oímos hablar continuamente? –El Papa (B16) acaba de referirse a ella, con tonos suaves pero profundamente alarmantes. La ideología de género destroza la familia, rompe todo lazo del hombre con Dios a través de su propia naturaleza, sitúa al hombre por encima de Dios, y entonces Dios ya no es necesario para nada, sino que hemos de prescindir de Él, porque Dios es un obstáculo para la libertad del hombre. Fuente: religión en libertad.
La ideología de género es una filosofía, según la cual “el sexo ya no es un dato originario de la naturaleza, que el hombre debe aceptar y llenar personalmente de sentido, sino un papel social del que se decide autónomamente, mientras que hasta ahora era la sociedad la que decidía” (B16). La frase emblemática de Simone de Beauvoir (1908-1986), pareja de Jean Paul Sartre: “Mujer no se nace, sino que se hace” expresa que el sexo es aquello que uno decide ser. Ya no valdrían las ecografías que detectan el sexo de la persona antes de nacer. Esperamos un bebé. ¿Es niño o niña? –La ecografía nos dice claramente que es niña. No. Lo que vale es lo que el sujeto decida. Si quiere ser varón, puede serlo, aunque haya nacido mujer. Y si quiere ser mujer puede serlo, aunque haya nacido varón. No se nace, se hace. Al servicio de esta ideología existen una serie de programas formativos, médicos, escolares, etc. que tratan de hacer “tragar” esta ideología a todo el mundo, haciendo un daño tremendo en la conciencia de los niños, adolescentes y jóvenes.
La ideología de género no respeta para nada la propia naturaleza en la que Dios ha inscrito sus huellas: soy varón, soy mujer, por naturaleza. Lo acepto y lo vivo gozosamente y con gratitud al Creador. No. Relacionar con la naturaleza, y por tanto con Dios, mi identidad sexual es una esclavitud de la que la persona tiene que liberarse, según esta ideología equivocada. De aquí viene un cierto feminismo radical, que rompe con Dios y con la propia naturaleza, tal como Dios la ha hecho. Un feminismo que se va extendiendo implacablemente, incluso en las escuelas. La iglesia católica es odiada por los promotores de la ideología de género, precisamente porque se opone rotundamente a esto. “Ahora bien, si no existe la dualidad de hombre y mujer como dato de la creación, entonces tampoco existe la familia como realidad preestablecida por la creación” (B16).
Y, sin embargo, una de las realidades más bonitas de la vida es la familia. La familia según su estructura originaria, donde existe un padre y una madre, porque hay un varón y una mujer, iguales en dignidad, distintos y complementarios. Donde hay hijos, que brotan naturalmente del abrazo amoroso de los padres. La apertura a la vida prolonga el amor de los padres en los hijos. Donde hay hermanos, y abuelos, y tíos, y primos, etc. ¡Qué bonita es la familia, tal como Dios la ha pensado! Dios quiere el bien del hombre, y por eso ha inventado la familia. Aunque la ideología de género intenta destruirla, la fuerza de la naturaleza y de la gracia es más potente que la fuerza del mal y de la muerte. La familia necesita la redención de Cristo, porque Herodes sigue vivo, y no sólo mata inocentes en el seno materno, sino que intenta mentalizar a nuestros niños, adolescentes y jóvenes con esta ideología, queriendo hacerles ver que hay “otros” tipos de familia.
El Hijo de Dios nació y vivió en una familia y santificó los lazos familiares. La fiesta de la Sda. Familia de Nazaret en el contexto de la Navidad es una preciosa ocasión para dar gracias a Dios por nuestras respectivas familias, que son como el nido donde hemos nacido o donde crecemos y nos sentimos amados. Es ocasión para pedir por las familias que atraviesan dificultades, para echar una mano a la familia que tengo cerca y cuyas necesidades no son sólo materiales, sino a veces de sufrimientos por conflictos de todo tipo. La fiesta de la Sda. Familia de Nazaret, compuesta por Jesús, María y José es una oportunidad para reafirmar que sólo en la familia, tal como Dios la ha instituido, encuentra el hombre su pleno desarrollo personal y, por tanto, la felicidad de su corazón. En la familia está el futuro de la humanidad, en la familia que responde al plan de Dios. Recibid mi afecto y mi bendición: + Demetrio Fernández, Obispo de Córdoba
Hay ideologías sagradas e intocables que en Andalucía no se pueden criticar ni someter al libre debate de las ideas y una de esas ideologías intocables es la ideología de género. Y si no, que se lo pregunten al obispo de Córdoba.
El obispo Demetrio Fernández criticó en su reciente carta semanal la ideología de género, un tema que tomó del último discurso de 2012 de Benedicto XVI a la Curia romana, en el que el Papa desmontaba con contundencia el absurdo de esta ideología (que no tiene nada que ver con la igualdad de derechos y dignidad entre el hombre y la mujer, algo que la Iglesia sí apoya plenamente).
Políticos quieren "un bozal" para el obispo
Como respuesta, aunque el obispo no mencionaba para nada al gobierno andaluz (en manos de socialistas y postcomunistas), el portavoz de la Junta de Andalucía, Miguel Ángel Vázquez, escribió y difundió un post en su blog personal titulado "Un bozal para monseñor".
"Monseñor se ejercita de provocador azuzando polémicas que chocan contra los derechos individuales y colectivos recogidos en la Constitución. Su última salida de tono ha sido un ataque frontal contra la ideología de género, es decir, contra la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres", escribe el político, que confunde la igualdad hombre-mujer con esta ideología particular.
A continuación, el político se despacha contra el obispo: "le gusta más la sección femenina, las amas de casa serviles y sumisas a sus esposos, ese arquetipo de la mujer"; su posición, dice, "se adentra hasta el tuétano en los terrenos de la misoginia, el machismo y la discriminación por razón de sexo", "visión retrógrada", "reaccionaria", etc... aunque no argumenta en que frases del obispo se sustentan estas acusaciones.
La aconfesionalidad y los bozales para obispos
A continuación, el político critica que se haya "fulminado" la asignatura Educación para la Ciudadanía (en la que se podía suspender a los alumnos que no compartieran los valores relativistas inculcados por el profesor o libro de turno) "para recortarnos hasta la libertad de pensamiento". "Ni un paso atrás, vivimos en un estado aconfesional", ha concluido el político... que parece pensar que la aconfesionalidad consiste en poner bozales a los obispos o quienes critiquen ciertas ideologías.
Los ideólogos del "generismo"
También han reaccionado contra el texto del obispo los lobbies del homosexualismo político y del feminismo radical. La Confederación Española de Asociaciones de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (Colegas) "lamenta" que el obispo "prosiga en su escalada de acoso a lesbianas, gays, bisexuales y transexuales" , y dicen creer que algunos obispos "pretenden devolver la plena vigencia de las leyes de vagos y maleantes y condenar a lesbianas, gays, bisexuales y transexuales al ostracismo social, la autocompasión y el rechazo de su identidad natural" (la homosexualidad ya no sería sólo una tendencia sexual, sino una "identidad natural", según este lobby).
Un lobby feminista, la "Plataforma Andaluza de Apoyo al Lobby Europeo de Mujeres", aprovecha para atacar a la Iglesia católica, a la que su presidenta, Rafaela Pastor, califica de "misógina y machista" y que "nos está retrotrayendo a la Edad Media". También lamenta que "haya sido suprimida" Educación para la Ciudadanía y que "se quiera cambiar la Ley del Aborto o imponer la custodia compartida".
Córdoba tiene "Familia" e "Igualdad"
Al paso de estas reacciones, la concejal de Familia y Servicios Sociales del ayuntamiento de Córdoba, María Jesús Botella (del PP), dice que respeta "mucho" las declaraciones del obispo cordobés. La concejalía de familia es una novedad en Córdoba, donde también hay una "Delegación de Igualdad". "Se debe avanzar en la igualdad y la protección de la familia de una manera armoniosa, paralela y en el seno de la institución familiar, quien la tenga", dijo la política cordobesa, especificando: "en cualquier" tipo de familia.
En realidad, la Carta del Obispo viene a decir lo mismo que dijo el Papa a la Curia a finales de 2012 (sin especiales reacciones de las asociaciones mencionadas) y no muy distinto a lo que se predicó en la Plaza de Colón el 30 de diciembre.
Lo que dijo el obispo de verdad
El obispo de Córdoba recuerda algo básico: que el sexo de una persona viene dado por la naturaleza, no es algo que se elija. Pero contra esta realidad natural y biológica innegable está la ideología de género que dice que una niña "si quiere ser varón, puede serlo, aunque haya nacido mujer" y viceversa, a lo que agrega que "al servicio de esta ideología existen una serie de programas formativos, médicos o escolares, que tratan de hacer tragar esta ideología a todo el mundo, haciendo un daño tremendo en la conciencia de los niños, adolescentes y jóvenes".
Cierto feminismo radical contra Dios
El obispo recordaba que esta ideología viene de "un cierto feminismo radical, que rompe con Dios y con la propia naturaleza, tal como Dios la ha hecho". Un feminismo, denuncia, que "se va extendiendo implacablemente, incluso en las escuelas".
Y afirma que "la iglesia católica es odiada por los promotores de la ideología de género, precisamente porque se opone rotundamente a esto" (como se ha demostrado por las reacciones airadas contra la carta).
Después el obispo defendía a la familia y su "estructura originaria, donde existe un padre y una madre, porque hay un varón y una mujer, iguales en dignidad, distintos y complementarios", e igualmente "donde hay hijos, que brotan naturalmente del abrazo amoroso de los padres".
"Herodes sigue vivo"
"La familia necesita la redención de Cristo, porque Herodes sigue vivo, y no sólo mata inocentes en el seno materno, sino que intenta mentalizar a nuestros niños, adolescentes y jóvenes con esta ideología, queriendo hacerles ver que hay otros tipos de familia", escribe el obispo en una frase que ha enfurecido a los militantes de la ideología generista.
Para el obispo, "en la familia está el futuro de la humanidad, en la familia que responde al plan de Dios".