22 November 2024
 

 

 

 

 

 

Bodas de Oro Sacerdotales de Monseñor Flavio Calle Zapata

22 de agosto  de 1968-2018

 

Monseñor Flavio Calle Zapata nació en San Andrés de Cuerquia, Antioquia el 18 de febrero de 1944, en el seno de la familia fundada por don Pedro Calle y doña Celia Zapata. 

 

Cursó sus estudios de secundaria en el Seminario Menor de Santa Rosa de Osos y los de Filosofía y Teología en el Seminario Mayor de la misma diócesis. 

 

Fue ordenado sacerdote el 22 de agosto de 1968 por imposición de manos y oración consecratoria del Santo Padre, Pablo VI en su Visita Apostólica a Colombia. Inició el ministerio sacerdotal como miembro del equipo diocesano de pastoral juvenil; después fue párroco de El Bagre-Antioquia durante 9 años y, seguidamente, miembro del Equipo diocesano de Pastoral. Fue enviado a Roma a estudiar y obtuvo la licenciatura y doctorado en Teología Moral en la Pontificia Universidad Gregoriana. A su regreso trabajó como profesor y director espiritual en el Seminario de Santa Rosa de Osos. 

 

El 16 de febrero de 1989 fue nombrado por el Papa Juan Pablo II, como Obispo-Prelado del Alto Sinú y San Jorge. Recibió la consagración episcopal el 16 de marzo del mismo año, a manos de su consagrante principal: el entonces Obispo de Santa Rosa de Osos Mons. Joaquín García Ordóñez; y de sus co-consagrantes: el entonces Nuncio Apostólico en el país Monseñor Angelo Acerbi y el entonces Obispo de Pereira Monseñor Darío Castrillón Hoyos. Al año siguiente ocupó el cargo de Administrador Apostólico en la Diócesis de Sincelejo. 

 

El 16 de febrero de 1993 fue nombrado Obispo titular de la Diócesis de Sonsón-Rionegro en Antioquia; tomó posesión solemne de la diócesis en 19 de marzo en la Catedral de Rionegro y al día siguiente en la catedral de Sonsón. Su principal preocupación fue implementar en la diócesis un plan de pastoral para la Nueva Evangelización, siguiendo las directrices de la Conferencia de Santo Domingo, logrando integrar el clero, las comunidades religiosas y el laicado.  También fue notable su trabajo por las vocaciones y las misiones, abriendo nuevas experiencias misioneras en Asia, África y Centroamérica. 

 

Durante su pastoreo como obispo de esta Diócesis fortaleció la Pastoral Social, creó la Corporación Vida, Justicia y Paz e impulsó los programas de educación para la paz, sobre todo a través de los Movimientos Sembradores de Paz y Jóvenes Constructores de Sociedad Civil; él mismo lideraba la organización de los dirigentes de la región para trabajar por la pacificación, siendo considerado “mensajero y constructor de paz” en su región, azotada por la acción de grupos armados en conflicto. 

El 10 de Enero de 2003 el Santo Padre Juan Pablo II lo nombró Arzobispo de Ibagué y El 19 de marzo de 2003 tomó posesión de su Sede Episcopal en la Catedral Metropolitana Inmaculada Concepción.

Desde su llegada a Ibagué se preocupó por la formacion de los futuros sacerdotes y la formación del clero. El 8 de septiembre de 2003  presidió la celebración del Centenario de la fundación del Seminario Mayor María Inmaculada y ha enviado a muchos sacerdotes a estudiar a Roma y a España. Como expresión de su comunión y cuidado de los sacerdotes creó la Casa Sacerdotal “San José” para acoger sacerdotes ancianos y enfermos y brindarles una atención integral. 

 

En el año 2007 participó en la V Asamblea del Episcopado Latinoamericano en Aparecida, Brasil y respondiendo a esta Asamblea, del 2009 al 2011 promovió la Gran Misión Arquidiocesana para fortalecer los procesos de evangelización en las comunidades parroquiales. El 14 de marzo de 2014 hizo el lanzamiento del nuevo Plan de Pastoral para la Arquidiócesis de Ibagué con duración hasta el 2020. 

 

Su pastoreo en la Arquidiócesis de Ibagué lo ha llevado a promover la Pastoral Social con el fortalecimiento del Banco Arquidiocesano de Alimentos, creado por su predecesor Mons. Juan francisco Sarasti el 12 de Junio del año 2002; impulsó en el año  2012 la consecución de un predio para la nueva construccion del Hogar de Paso para el habitante de la calle y fortaleció la Fundación para la Salud José Joaquín Florez Hernández. 

 

El 18 de junio de 2003 hizo parte de la fundación de la Corporación Desarrollo y Paz del Tolima TOLIPAZ,con “el propósito de promover el desarrollo y la paz en el departamento, especialmente en los territorios más afectados por el conflicto armado y con las poblaciones más vulnerables”.

 

Su sentida devoción a San José lo ha inspirado a promover el amor al Santo Patriarca mediante la predicación y la realización de dos Congresos nacionales josefinos con sede en Ibagué, acogiendo peregrinos de todo el Pais y alcanzando una cobertura internacional a traves de distintos medios de comunicación. Ha promovido el nacimiento de nuevas parroquias y la presencia de comunidades religiosas en la Arquidiócesis. 

 

En la Conferencia Episcopal Colombiana ha pertenecido a diversas comisiones y servicios: en 1993 pertenecío a la Comision Episcopal para la Evangelización de la Cultura y la Educación; del 2005 al 2008 fue Presidente de la Comisión Episcopal para la Familia, la Vida y el Estado Laical. Del 2011 al 2014 fue representante de la Conferencia Episcopal ante el Instituto de Bienestar familiar y Sustituto Delegado de la CEC ante el Consejo Episcopal Latinoamericano CELAM. Del 2014 al 2017 fungió como representante de la Comisión Permanente para el Consejo de Presidencia.